Y cándido me
encontré,
en esos espacios que
oscurecen mi vista
todavía extraño tu
presencia.
Desearía ser niño otra
vez.
Los días son tan claros
como tus ojos
y mi vida tan liviana como
tu cuerpo.
No interesa depender de
tus mentiras.
Es mi alma la que se
pierde con el tiempo.
Yo no quiero renacer de
tus palabras.
Quisiera encontrarme
nuevamente en tu desierto
ya no se ni lo que quiero,
es esta vejez adelantada.
Aún recuerdo esos días a
tu lado
tu corrías tras deseos
desenvueltos,
yo era el aire de aquellos
desenlaces,
no importa olvidarte otra
vez.
se que todo regresa y se
va.
se que estando sin ti ya
nada importa.
olvidé como era tu
mirada al sonreír.
somos una pesadilla
que no puede existir.